Infección por Virus del Zika

Definición:
La infección por el virus del Zika es una enfermedad viral transmitida principalmente por la picadura de mosquitos infectados del género Aedes, aunque también puede transmitirse por vía sexual o a través de transfusiones de sangre. La infección suele ser leve, pero puede tener graves consecuencias en mujeres embarazadas, como defectos congénitos, especialmente microcefalia en los recién nacidos.

Agente Etiológico:
El agente causante de la infección es el virus del Zika, un flavivirus relacionado con otros virus transmitidos por mosquitos, como el virus del dengue y el virus del chikungunya.

Exantema:
El exantema en la infección por virus del Zika es característico e incluye:

  • Maculopápulas pruriginosas (lesiones elevadas y planas de color rojo o rosado), que son eritematosas (rojizas) y causan picazón.
  • El exantema comienza en el tronco y se extiende hacia la mitad inferior del cuerpo (piernas y pies).
  • En algunos casos, puede observarse hiperemia conjuntival (enrojecimiento de los ojos) y petequias (pequeñas manchas rojas) en el paladar blando, lo cual es un signo clínico poco frecuente, pero puede ser observado.

Síntomas:
Los síntomas típicos de la infección por el virus del Zika incluyen:

  • Artralgias (dolor en las articulaciones) y mialgias (dolor muscular).
  • Linfadenopatía (inflamación de los ganglios linfáticos), especialmente en el cuello y detrás de las orejas.
  • Cefalea (dolor de cabeza) y febrícula (fiebre leve).
  • La mayoría de los casos son leves, pero en mujeres embarazadas, el virus del Zika puede causar defectos congénitos graves como microcefalia (desarrollo anormal del cerebro en el feto).
  • También puede causar complicaciones neurológicas graves como el síndrome de Guillain-Barré, una enfermedad autoinmune que puede afectar los nervios periféricos.

Diagnóstico:
El diagnóstico de la infección por el virus del Zika se realiza mediante pruebas serológicas o moleculares para detectar la presencia del virus o anticuerpos específicos en la sangre. En casos de embarazadas, también se pueden realizar ecografías para monitorear el desarrollo del feto.

Tratamiento:
No existe un tratamiento antiviral específico para la infección por el virus del Zika. El manejo es sintomático y se enfoca en aliviar los síntomas. Las principales recomendaciones son:

  • Paracetamol o ibuprofeno para controlar la fiebre y el dolor.
  • Hidratación adecuada y descanso.
  • Las mujeres embarazadas deben ser monitoreadas estrechamente para detectar posibles malformaciones congénitas, y el seguimiento prenatal debe incluir ecografías regulares.
  • Reposo y evitar el contacto con mosquitos para prevenir la transmisión del virus a otras personas.

Pronóstico y Prevención:
La mayoría de las personas infectadas por el virus del Zika se recuperan sin complicaciones graves. Sin embargo, los embarazos son de alto riesgo debido a la posibilidad de defectos congénitos.
La prevención de la infección se basa en evitar las picaduras de mosquitos mediante el uso de repelentes, mosquiteros, y ropa protectora, especialmente en áreas endémicas. También es crucial la prevención de la transmisión sexual mediante el uso de preservativos.

Referencia:

  1. World Health Organization (WHO). (2016). Zika virus and complications. World Health Organization. Available from: https://www.who.int/news-room/fact-sheets/detail/zika-virus
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